William Shakespeare

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El pecado de amarte se apodera -  William Shakespeare

El pecado de amarte se apodera

De mis ojos, de mi alma y de mí todo;

Y para este pecado no hay remedio

Pues en mi corazón echó raíces.


Pienso que es el más bello mi semblante,

Mi forma, entre las puras, la ideal;

Y mi valor tan alto conceptúo

Que para mí domina a todo mérito.


Pero cuando el espejo me presenta,

Tal cual soy, agrietado por los años,

En sentido contrario mi amor leo


Que amarse siendo así sería inicuo.

Es a ti, otro yo mismo, a quien elogio,

Pintando mi vejez con tu hermosura.